El espectacular incremento de la inflación que se ha producido en España durante los últimos meses ha provocado que la recaudación del Estado se vea incrementada de forma significativa.
En los dos primeros meses del año 2022, el Gobierno de España ha recaudado aproximadamente un 20% más que en el mismo período del año anterior.
Este incremento en la recaudación se produce principalmente gracias a los impuestos indirectos, tales como el IVA o los impuestos sobre hidrocarburos.
¿Qué es un impuesto indirecto?
Aquel que grava el uso de la riqueza por parte de los ciudadanos.
El impuesto indirecto más conocido es el IVA, consistente en un porcentaje que se aplica sobre el consumo de bienes y servicios.
De esta forma, si aumenta el precio de los bienes y servicios y el porcentaje de IVA se mantiene constante, el total de la recaudación será cada vez mayor.
Esta circunstancia provoca que Hacienda vea mejoradas las cuentas públicas y facilita la reducción del déficit. Quizás ese es el motivo por el que el Gobierno, de momento, se niega a rebajar impuestos para contener los precios.
No obstante, la consecuencia negativa es un empobrecimiento de las familias y las empresas, destruyendo puestos de trabajo y reduciendo el crecimiento del país en el corto y medio plazo.