Una vez finalizados los Juegos Olímpicos de París 2024 es turno de analizar los resultados de tan importante acontecimiento. Tanto para la ciudad encargada de la organización como para España como participante, es turno de revisar los aspectos más destacados en términos financieros de esta nueva edición del deporte olímpico.
La edición de los Juegos Olímpicos 2024 se ha llevado a cabo en una de las ciudades más icónicas y mundialmente reconocidas: París. Como país anfitrión, Francia organizó un evento caracterizado no sólo por la calidad de las competiciones, sino por el aprovechamiento de todos sus recintos y espacios deportivos. Las competiciones se desarrollaron en distintos lugares emblemáticos de la capital francesa como el Stade de France, el complejo deportivo de Bercy, y otras locaciones históricas como el Campo de Marte, con la Torre Eiffel como telón de fondo.
A pesar de las múltiples disciplinas presentes, París ha llevado a cabo una organización sólida de los Juegos Olímpicos 2024.
Bajo estos parámetros, la organización de estos Juegos Olímpicos ha destacado sobre todo por el presupuesto dedicado al gran espectáculo deportivo que los espectadores han terminado presenciando. Cabe destacar que en su totalidad, el presupuesto de París 2024 proviene del sector privado. Se trata de una inversión significativa por parte del comité organizador y empresas privadas en el que se han requerido más de 4.000 millones de euros dedicados a infraestructuras y cobertura de los diferentes acontecimientos deportivos. A dicha cantidad hay que añadirle la asignación del COI (Comité Olímpico Internacional) que consiste en 1.200 millones de euros.
Este presupuesto ha sido destinado a la renovación y construcción de instalaciones deportivas, así como a la mejora de los sistemas de transporte y alojamiento para los deportistas y turistas que han permanecido en la ciudad de París durante los 17 días de competición.
Los Juegos Olímpicos no solo representan una competición deportiva de gran relevancia, sino que también se traduce en una inyección económica significativa para el país anfitrión. Una de las principales fuentes de ingresos proviene de los patrocinios y la publicidad. Grandes marcas globales firmaron acuerdos millonarios para asociarse con los Juegos Olímpicos, buscando aprovechar la exposición mundial del evento para promocionar sus productos y servicios. De la asignación comentada anteriormente y proveniente del COI, son más de 400 millones de euros los que provienen de marcas y patrocinadores. Por otra parte, la organización también se aseguró de recibir un total de 750 millones de euros solo en derechos de televisión para la retransmisión de todas las competiciones.
Además de los ingresos por patrocinios y publicidad, el turismo también ha tenido un papel fundamental en la economía durante las olimpiadas. París, siendo una de las ciudades más visitadas del mundo, ha congregado a miles de turistas adicionales que han presenciado las competiciones. Estos turistas han gastado dinero en alojamiento, alimentación, transporte y otras actividades turísticas, generando así un impacto económico positivo en la ciudad y en el país. Se estima que entre aspectos como la hostelería, la venta de entradas o la concesión de licencias de productos, el país ha generado más de 1.300 millones de euros a lo largo de todo el periodo de competición
En síntesis, el desarrollo económico nacional también se ha visto impulsado por la infraestructura mejorada, ya que muchas de estas mejoras perdurarán más allá de los juegos y beneficiarán a la población local. La promoción internacional de París como destino turístico y la atracción de futuras inversiones son otros aspectos positivos derivados de la organización de esta edición de los Juegos Olímpicos.
En cuanto a España, los deportistas que han representado al país, han realizado una buena participación en las distintas disciplinas de la edición. Es por ello, que el éxito deportivo ha venido acompañado de recompensas económicas significativas. Para la edición de París 2024, el Comité Olímpico Español estableció un sistema de premios en efectivo para incentivar a los atletas a dar su máximo desempeño en las competiciones. Los ingresos para los medallistas se han distribuido de la siguiente manera: 94.000 euros por una medalla de oro, 48.000 euros por una medalla de plata y 30.000 euros por una medalla de bronce. Se trata de cantidades que de alguna manera contrastan con los incentivos que otras delegaciones han otorgado a sus deportistas durante esta edición. Tal es el caso de delegaciones como Francia o Estado Unidos que pagaron a sus deportistas cantidades como 38.000 y 85.000 euros por una medalla de oro.
Entre los deportistas españoles que han alcanzado el podio en los Juegos Olímpicos de París 2024 destacan nombres como Carlos Alcaraz, que obtuvo la medalla de plata en tenis, Jordan Díaz en, que logró una medalla de oro triple salto, o la selección masculina de fútbol que obtuvo el oro tras derrotar a Francia en la final. Cabe destacar que además de las recompensas mencionadas, existen casos como el de Carlos Alcaraz o la selección de fútbol, en los que las cantidades varían. En el caso del tenista murciano, obtuvo el derecho de aceptar una beca de 45.000 euros por mérito deportivo que parece que terminará rechazando.
Los deportistas españoles han completado una participación destacada en cuanto a las medallas conseguidas en París 2024.
En cuanto a los jugadores de la selección de fútbol, al tratarse de un deporte colectivo, la compensación económica ha sido de 18.000 para cada uno de los convocados. De esta manera, las recompensas obtenidas en esta edición de los Juegos Olímpicos han variado en función de la disciplina y del deportista participante.
La Agencia Tributaria también juega un papel importante en la declaración de los ingresos generados por los medallistas olímpicos. De acuerdo con la legislación fiscal vigente, los ingresos obtenidos por medio de premios y recompensas deben ser declarados y están sujetos a impuestos.
Esto implica que, aunque los atletas españoles hayan recibido una suma considerable por sus logros, una parte de esta cantidad será retenida por Hacienda. En el caso de una medalla de oro, se estima que la Agencia Tributaria reclama un 22,5% del premio. Esto significa que de un ingreso estimado de 94.000 euros, el deportista debe abonar cerca de 22.000 euros. Además de la principal deducción, se deben tener en cuenta las becas por mérito deportivo y las cantidades que cada federación haya entregado a sus deportistas según el deporte cursado. Este proceso asegura que se cumpla con las obligaciones tributarias, contribuyendo de esta forma al desarrollo económico del país.
En conclusión, la edición de los Juegos Olímpicos de París 2024 ha supuesto una gran inyección de capital para el país anfitrión en una de las ediciones más vistas a nivel mundial. No obstante, pese a los logros obtenidos a nivel deportivo, para España sigue pendiente mejorar sus resultados de la edición de 1992.
La organización de la edición 2024 |
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La rentabilidad de los juegos olímpicos |
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Recompensas para los competidores españoles |
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Retención de hacienda por medallas obtenidas |
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