Elecciones al parlamento Europeo, ¿en qué afecta a la economía española?

Analizamos el impacto de las elecciones al Parlamento Europeo en la economía española. Descubre cómo los resultados electorales y las políticas europeas pueden influir en el crecimiento económico, la inversión y el empleo en España. Infórmate sobre las implicaciones económicas de estos comicios en nuestro artículo detallado.

Índice

1. Contexto de las Elecciones al Parlamento
2. Resultados de las Elecciones y su Influencia en la Economía Europea
3. Impacto de las Elecciones en la Economía Española
4. Áreas Económicas Clave Afectadas
5. Perspectivas futuras
6. Tabla resumen

Introducción

Cada cinco años se realizan las elecciones europeas. En ellas, cada país miembro elige a un cierto número de diputados, quienes formarán parte de la única institución de la Unión Europea elegida por votación de los ciudadanos y del único parlamento transnacional del mundo: el Parlamento Europeo. Aunque Bruselas nos parezca lejana y ajena, desde ahí se dicta el rumbo de la Unión Europea, que es también nuestro rumbo como estado miembro (escribimos esto desde España). El Parlamento Europeo es una de las instituciones que dicta este rumbo, en ocasiones en consonancia y otras en tirantez con el Consejo y la Comisión Europea.

Este artículo no pretende ser un panfleto de ningún partido político ni instigar, con frases manidas, al voto por el voto. Más bien, busca poner de manifiesto cómo nuestro destino está unido al destino del resto de los miembros de la Unión Europea, la gran cantidad de medidas que se dictan desde Bruselas y cómo estas afectan a nuestra economía y nuestra sociedad.

Contexto de las Elecciones al Parlamento

Para poder entender el papel que tiene el Parlamento Europeo, primero hay que comprender con qué instituciones comparte el poder político de la Unión. Tenemos la Comisión Europea, la cual ejerce el poder ejecutivo y tiene la facultad de proponer leyes, es decir, tiene la iniciativa legislativa. Está formada por un miembro de cada país, y su presidente es, de facto, el presidente de la Unión Europea. Por otro lado, tenemos el Consejo Europeo, compuesto por los presidentes de los países miembros, el presidente de la Comisión Europea y el propio presidente del Consejo. Este órgano se supone que sirve para dar directrices generales no vinculantes y representar la unidad de los distintos miembros. Sin embargo, con eventos como la elección de Ursula von der Leyen como presidenta de la Comisión y otros tejemanejes políticos que son harina de otro costal, se ha demostrado que tienen más poder del que se establece en los tratados.

El poder está repartido entre más instituciones, pero son el Consejo y la Comisión las que tienen más relación con el Parlamento. Ya entrando en su funcionamiento, el Parlamento está formado por 720 diputados, elegidos por los distintos países. Cada país tiene asignado un número de diputados según su población, y una vez estos diputados son elegidos y llegan al Parlamento, no representan al país del que provienen, sino que se agrupan en grupos políticos más grandes (Partido Popular Europeo, Los Verdes, Partido Socialista Europeo…) o pueden estar de manera independiente, pero representando a sus votantes como ciudadanos europeos y no los intereses de su país. En el Parlamento se debaten, proponen y aprueban las leyes; además, se debe aprobar al presidente de la Comisión Europea y al presidente del propio Parlamento, quien también tiene una importante labor representativa de la Unión. El Parlamento se vota cada cinco años, pero el presidente lo es durante dos y medio.

El Parlamento Europeo es la institución encargada de marcar la dirección de todos los países que componen el continente europeo.

El origen del Parlamento Europeo se encuentra en la asamblea de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero, la cual surgió en 1952. Solamente tenía carácter consultivo, siendo prácticamente su único poder efectivo el de forzar la dimisión de la Alta Autoridad de la CECA, organismo que acabaría convirtiéndose en la Comisión Europea. Sus miembros no eran elegidos por el voto de los ciudadanos, sino por los parlamentos de los países miembros.

A medida que se fue desarrollando lo que hoy conocemos como la Unión Europea, esta asamblea fue aumentando el número de miembros y el poder de esta cámara. La primera vez que los miembros de este parlamento fueron elegidos a través de sufragio fue en 1979, aunque el parlamento siguió teniendo un valor meramente consultivo. Luego, en 1986, con el Acta Única Europea, el parlamento vio sus competencias ampliadas; desde entonces, participa en la legislación, pudiendo modificar leyes directamente. Las últimas reformas que han afectado a los poderes del parlamento han sido las del Tratado de Maastricht en 1992, desde el cual el Consejo Europeo no puede imponer su voluntad sobre la del Parlamento; el Tratado de Ámsterdam, a partir del cual el presidente de la Comisión Europea es aprobado por el parlamento; y desde 2007, con el Tratado de Lisboa, el presidente debe elegirse tomando en consideración los resultados de las elecciones al parlamento.

La composición del Parlamento no es una cuestión baladí para los países miembros, ni muchísimo menos, ya que las decisiones tomadas por el Parlamento afectan directamente a estos países. Las leyes de la UE son vinculantes en todo su territorio, y hay ciertos sectores y ámbitos que se ven especialmente afectados, como la agricultura o la inmigración.

Resultados de las Elecciones y su Influencia en la Economía Europea

En las últimas elecciones, los grupos políticos más votados fueron: el Partido Popular Europeo con 182 diputados, el Partido Socialista Europeo con 154, Renew Europe (liberales) con 108, los Verdes (homólogo a Podemos) con 74, Identidad y Democracia con 73 (ideario que se podría asemejar a Vox, aunque Vox forme parte del siguiente grupo), los Conservadores y Reformistas Europeos con 62, y finalmente la Izquierda Unitaria Europea con 41 (similar a los Verdes, pero con una vuelta más de tuerca). Se puede observar cómo este Parlamento se podría considerar bastante "de centro". Algo que tenemos que tener en cuenta al hacer análisis es que no podemos trasladar las posiciones de los partidos socialistas y populares patrios a los europeos, siendo estos mucho más similares a los partidos homólogos alemanes, más moderados y tendientes a la gran coalición, votando ambos lo mismo en la mayoría de propuestas. Esto es algo que en España no suele pasar, ya que somos un país donde ambos partidos están separados, al menos en el discurso y de cara a la galería.

Cabe remarcar que el Parlamento Europeo, como cualquier otro, ha cambiado su composición. Aunque es cierto que tanto el Partido Popular Europeo como el Partido Socialista Europeo han sido fuerzas mayoritarias, al haber tantos diputados, el espacio para fuerzas minoritarias es muy grande. Las elecciones europeas han sido la primera vez que algunas fuerzas minoritarias han comenzado a tener representación, destacando en España el caso de Podemos en 2014. Otra peculiaridad de este Parlamento es que ha menguado y se ha ampliado. Debido al Brexit, los parlamentarios del Reino Unido desaparecieron, y este año se aumenta con respecto a las elecciones anteriores 15 diputados, dos de ellos serán para España. La composición resultante de las elecciones de este fin de semana aún es un misterio, pero se espera un giro hacia la derecha y hacia el euroescepticismo.

Impacto de las Elecciones en la Economía Española

Del resultado de las elecciones europeas depende la política de la UE y, por ende, la economía de España se verá muy afectada. Sobre el futuro, se pueden hacer múltiples quimeras. Pero si miramos al pasado, vemos que lo que es un hecho es que el efecto sobre la economía española de las políticas de la Unión existe.

El resultado de las elecciones europeas marca el devenir de la situación de países entre los que se encuentra España.

En primer lugar, hay que tener en cuenta que la política de comercio exterior es dictada desde Bruselas. Ejemplos recientes han sido el tratado de libre comercio con Mercosur, el cual se estima que aumentó las exportaciones de España a los países miembros de Mercosur en un 37%. Luego tenemos todos los fondos de cohesión que reparte la Unión Europea, el dinero que se repartió de manera extraordinaria por el COVID-19, o la muy polémica Política Agraria Común, que fija objetivos de producción y ayudas al sector primario. Cabe destacar que algunas cuestiones relacionadas con la Unión Europea, y que son de vital importancia para la economía de nuestro país, no son votadas en el Parlamento, todo lo que tenga que ver con política monetaria, por ejemplo. Ya que el Banco Central Europeo toma sus decisiones de manera independiente.

Áreas económicas clave afectadas

La economía española se verá fuertemente afectada por el resultado de las elecciones. Estos son algunos de los sectores clave en los que más influencia puede tener.

Energía y Medio Ambiente: Las elecciones europeas pueden influir en las políticas relacionadas con la energía y el medio ambiente, lo que a su vez afecta a sectores como las energías renovables, la eficiencia energética y la industria automotriz. Si bien la UE ha establecido objetivos ambiciosos en la agenda 2030, algunas críticas sugieren que las políticas actuales pueden no ser apropiadas o coherentes para alcanzar sus objetivos.

Agricultura y Pesca: Las políticas agrícolas y pesqueras de la UE son áreas de interés para España, que cuenta con una importante industria agroalimentaria y pesquera. Las elecciones europeas pueden influir en la distribución de fondos agrícolas y pesqueros, así como en la regulación ambiental y alimentaria. Si bien la agenda 2030 incluye objetivos relacionados con la agricultura sostenible y la gestión de los recursos pesqueros, algunos críticos argumentan que las políticas actuales de la UE no abordan adecuadamente los desafíos específicos de cada país miembro, lo que puede afectar negativamente a la competitividad y la sostenibilidad de las industrias agrícolas y pesqueras españolas.

Tecnología e Innovación: Las políticas europeas sobre tecnología e innovación pueden tener un impacto significativo en la economía española, especialmente en sectores como la investigación, el desarrollo y la digitalización. Laa agenda 2030 incluye objetivos relacionados con la promoción de la innovación y el acceso equitativo a la tecnología, pero algunas críticas señalan que las políticas de la UE pueden favorecer a los países más desarrollados en detrimento de las economías periféricas como España.

Perspectivas futuras

Las medidas que se implementen de ahora en adelante dependerán del resultado, que aún desconocemos. Pero es cierto que, viendo las previsiones de voto, e incluso observando las medidas que se estaban tomando y, sobre todo, el tono y los temas que eran centro del debate, podemos esperar un cambio respecto a lo que se ha producido en el último quinquenio. En los últimos meses, y en el contexto de las tensiones con China (recordemos que Biden no enfrió la "Guerra Comercial con China" sino todo lo contrario), se habló mucho de imponer aranceles y controles, especialmente en el mercado de los automóviles. Otro tema que estará sin duda en la mesa es la inmigración. Aparte de los restos sociales y demográficos que plantea, afecta enormemente a la economía, tendiendo a bajar los salarios, abaratar costes para las empresas y cambiar los patrones de consumo.

Para España, esta situación, como de costumbre, presenta oportunidades y desafíos. La economía española tiene múltiples problemas: un desempleo que lleva sin bajar del 10% desde el segundo trimestre de 2008, una productividad estancada desde los noventa, el foco puesto en industrias de poco valor añadido, una vivienda inaccesible y unos salarios estancados. Pero quizás el cambio que se espera en Europa sea la oportunidad para España de subirse al carro. Desarrollarse de manera competitiva, priorizar sus intereses y así deshacerse de las remoras que sufre desde hace años.

Conclusión

El rumbo que siga la Unión Europea es en buena medida el rumbo que seguirá España, y ese rumbo depende en gran medida de lo que suceda en estas Elecciones Europeas. Puede que, en la UE, en ocasiones, se actúe en base a intereses de países particulares, y algunos países queden relegados. Pero si España sabe defender sus intereses y está bien posicionada ante el previsible cambio que veremos, esto puede ser muy beneficioso para nuestro país. A lo largo de los años en los que España ha sido parte de la Unión Europea, se ha visto cómo esta ha influenciado notablemente nuestra economía.

Tabla Resumen

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